¡fácil y saludable!
Helado de yogur griego con frutos rojos fácil y cremoso, sin heladera. Descubre esta receta casera saludable, perfecta para el verano. ¡Solo 4 ingredientes!
¿Te apetece un postre refrescante, sano y lleno de sabor? Hoy te comparto una receta que preparo cada verano y que nunca falla: helado de yogur griego con frutos rojos. Cremoso, con un toque ácido y dulzón, este helado casero es perfecto para esos días calurosos en los que te apetece algo ligero pero delicioso.
Además, no necesitas heladera ni ingredientes raros. ¡Solo ganas de disfrutar!
Porque combina lo mejor del verano: fruta, frescura y nutrición. Además, el yogur griego le aporta una textura cremosa sin necesidad de nata ni huevo. Es una opción genial para niños y mayores, y puedes prepararlo con antelación para tener siempre algo saludable en el congelador.
Lo bonito de esta receta es que es tan versátil como deliciosa. Si bien la versión clásica con frutos rojos es una de mis favoritas, puedes probar diferentes combinaciones de sabores según la fruta de temporada o lo que tengas en casa:
También puedes jugar con toppings: coco rallado, cacao nibs, trocitos de nueces, o incluso una cucharada de crema de cacahuete para una versión más golosa.
Este helado se puede conservar en el congelador durante aproximadamente 2 semanas, aunque lo ideal es consumirlo en los primeros días para que mantenga su mejor textura.
Un truco: si lo dejas muchas horas en el congelador y queda muy duro, simplemente saca el recipiente 10 minutos antes de servirlo. Así recuperará su cremosidad sin perder sabor.
A diferencia de otros helados más pesados, este es un postre que puedes disfrutar sin remordimientos. El yogur griego aporta proteínas y probióticos, y los frutos rojos están llenos de antioxidantes. Una forma sencilla de cuidarte mientras disfrutas de algo dulce, fresco y natural.
¿Lo mejor? ¡Nadie notará que es tan saludable! Una receta ideal para sorprender sin complicarte la vida.
Si te quedas con ganas de más postres fresquitos, prueba esta espuma de fresas, o este delicioso helado de chocolate blanco.
coloca los frutos rojos en una olla con un par de cucharadas de azúcar moreno.
remueve de vez en cuando, hasta que se haga una pequeña mermelada
si usas distintas frutas puedes ponerlas juntas en la sartén, o hacerlas por separado.
En un bol mezcla el yogur y la leche condensada, poco a poco, añade la fruta que hemos preparado antes
Pruébalo antes de congelar. Puedes añadir más miel o unas gotas de limón según tu gusto.
Vierte la mezcla en un recipiente hermético. Lleva al congelador al menos 4–6 horas. Para mejor textura, remueve con un tenedor cada hora durante las primeras 3 horas (opcional, pero recomendable si no tienes heladera).
Saca el helado unos minutos antes de servir para que sea más fácil de manipular. Puedes decorar con más frutos rojos, hojas de menta o trocitos de chocolate negro.
· Si usas yogur griego con azúcar, ajusta el dulzor según tus preferencias.
· Cuanto más maduros estén los frutos, más dulce será el resultado.
· Puedes añadir semillas de chía, copos de avena o frutos secos al servirlo como desayuno.
· Para una versión vegana, usa yogur vegetal tipo coco o soja y sirope de agave.
Este helado casero es una receta ideal para el verano, pero también para darte un capricho sano en cualquier momento del año. Si lo pruebas, cuéntame en los comentarios cómo lo preparaste, si cambiaste algo, o con qué lo acompañaste, me ayudarás a coger ideas!
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